Diciembre 2024.- El Gobierno de Castilla-La Mancha ha valorado positivamente la reciente decisión de la Unión Europea de flexibilizar el uso de los fondos europeos, permitiendo a las regiones afectadas por fenómenos meteorológicos extremos acceder a recursos adicionales para afrontar las consecuencias de estas catástrofes.
Una medida clave para la adaptación al cambio climático
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, en su intervención durante la 163.ª sesión plenaria del Comité de las Regiones en Bruselas, destacó la importancia de esta iniciativa para garantizar una respuesta eficaz ante los retos medioambientales. “Venimos a reclamar que Europa se una con España, con Castilla-La Mancha, con Valencia, porque hemos sufrido el zarpazo de la naturaleza. Esto ha pasado aquí, pero puede pasar en toda Europa”, afirmó.
García-Page subrayó la necesidad de adaptar y flexibilizar los mecanismos de fondos estructurales, como los del FEDER, para asegurar que las regiones puedan asumir los gastos derivados de estas crisis y estar mejor preparadas para las futuras emergencias climáticas. Además, reafirmó el compromiso del Gobierno regional con la sostenibilidad y la protección del medio ambiente, en línea con las políticas europeas.
Fortalecimiento del sector agrícola y rural
La medida también tiene implicaciones significativas para el sector agrícola y rural de Castilla-La Mancha. En el contexto de las negociaciones de la nueva Política Agraria Común (PAC), la región ha abogado por una mayor regionalización y adaptación de las políticas europeas a las especificidades del territorio. La flexibilización de los fondos europeos contribuirá a fortalecer la resiliencia de este sector frente a las adversidades climáticas, proporcionando herramientas financieras esenciales para su desarrollo sostenible.
Un compromiso con el desarrollo sostenible
El Gobierno regional continuará trabajando en estrecha colaboración con las instituciones europeas y nacionales para garantizar un uso eficiente y efectivo de los fondos disponibles. Este esfuerzo busca promover el desarrollo sostenible, proteger los recursos naturales y garantizar el bienestar de los ciudadanos de Castilla-La Mancha. Según García-Page, “es imprescindible que Europa adopte medidas estructurales y operativas para que podamos abordar las crisis climáticas de manera integral y solidaria”.
Esta iniciativa refuerza el papel de Castilla-La Mancha como líder en la implementación de políticas ambientales y en la construcción de un futuro resiliente para sus ciudadanos.